El décimo arte: hoy, God of War

El domingo pasado no puse entrada sobre un nuevo videojuego porque, la verdad, no estaba muy por la labor. Estaba bastante cansado y al día siguiente empezaba las clases en la facultad. Con ese panorama no tenía mucha inspiración. En fin, ya he pasado el síndrome postvacacional lo suficiente como para comentar sin pereza el que es uno de los juegos más potentes y entretenidos que hay en PS2.

"Cuando los dioses quieren destruir al hombre, primero lo vuelven loco." Eurípides (480-406 A. de C.) La mayor de las tragedias griegas. El más infame de los guerreros de la antigua Grecia está al borde de la locura, acosado por una sed insaciable de muerte y destrucción. Para Kratos no hay escapatoria. Su alma no tiene salvación. Pero su ansia de sangre culminará en una confrontación final. Kratos debe desafiar a su torturador. Debe vencer a Ares, el dios de la guerra.

God of War es un juego desarrollado por SCE Santa Monica y distribuido por Sony en 2005 tanto en América como en Europa. Es un juego de acción y aventura que destacó por sus gráficos realistas y su violencia desmedida. El juego fue altamente valorado tanto por la crítica como por los jugadores convirtiendo God of War en una de las sagas más rentables para Sony. Tiene una secuela para la misma consola llamada God of War II, una precuela en PSP con el subtítulo de Chains of Olympus y y el capítulo final para PS3 que será llamado God of War III.

El sistema de juego se basa en algo tan sencillo como avanzar por los escenarios y matar a todo bicho viviente. Con pequeñas dosis de plataformas y puzles, controlamos a Kratos que junto a sus espadas del caos deberá avanzar por los escenarios hasta conseguir alcanzar a Ares y vencerle. La chispa del juego está en sus adictivas peleas contra toda clase de enemigos sacados de la mitología griega. Desde medusas hasta cíclopes. Tenemos varios tipos de ataques como el débil pero rápido en ejecutarse y el fuerte pero más lento. Pasando por los agarres y por las magias que irá adquiriendo Kratos mientras avanza. Cualquier combinación es buena para derrotar a la ingente cantidad de enemigos que nos pueden aparecer en pantalla. Otra de las maneras de vencer a los enemigos (sobre todo a los finales) es pulsando el botón correcto cuando sale en pantalla para hacer una brutal carnicería si no has fallado. Sin duda, lo más "gratificante" visualmente.

Para coger experiencia hay que obtener los orbes rojos que salen de los cofres o de los enemigos que podrás canjear por mejoras en las armas y magias. Ciertos objetos te servirán también para aumentar la barra de vida y de magia. Es importante no olvidar casi ninguno porque con ciertos enemigos una barra de vida pequeña puede costar caro con el nivel de dificultad. Que, por supuesto, se puede ajustar para que llegue a ser un verdadero reto con el que sufras.

Los gráficos impactan nada más empezar el juego. El nivel de detalle en los personajes y escenarios es impresionante. En 2005 consiguió un verdadero avance respecto al uso de la potencia de PS2. Efectos de combate realistas (con ingentes cantidades de sangre) y variedad de combos que nunca te cansarás de ver en pantalla. Hay que decir que estos pueden ser no aptos para personas sensibles a la violencia y/o sangre.

El juego cuenta con unas pocas melodías épicas que van acorde a la historia griega que se cuenta. Pero en general el apartado no destaca cumpliendo, eso sí, con su misión. Quizá los alaridos de los enemigos sean lo más sobresaliente del sonido. Cabe destacar el doblaje al castellano con el que cuenta el juego que en general es de un nivel más que decente.

El argumento es una excusa para poner al protagonista con dos espadas y cientos de enemigos delante. Pero es una muy buena excusa para hacer el producto francamente disfrutable. Para vencer a Ares tendremos que cumplir una serie de requisitos (como encontrar la caja de pandora) para poder ser rival para el dios. Conoceremos multitud de parajes por los que debemos pasar en los cuales variarán los enemigos los distintos puzles a realidad, que nunca serán nada excesivamente complejo. Un guión bastante aceptable y sólido que nos sirve para recrearnos ante la antigua Grecia de manera totalmente gratificante.

En conclusión nos encontramos ante una de las aventuras más fascinantes que nos ha dado PlayStation 2. Gráficos extraordinarios, jugabilidad adictiva, preciso y con la variedad suficiente para asombrar al jugador y rendirse ante las virtudes de God of War. Asesinar, matar y exterminar son los objetivos de este juego que, a pesar de su duración algo corta, no empañan un resultado excelente que pondrá en tensión al jugador y no le soltará hasta haber logrado los deseos de venganza de Kratos. Te gusten o no este tipo de aventuras esta obra asombrará a propios y extraños por su estilo violento pero sin caer en el mal gusto con combates que, en la mayorías de los casos se pueden calificar, como mínimo, de épicos.

8,75 sobre 10.